jueves, 19 de junio de 2008

X FESTIVAL MÚSICA DE FE.

SAN FRANCISCO DE ASÍS, DISCÍPULO DE JESÚS.
LA ORDEN DE FRAILES MENORES CONVENTUALES TE INVITA A QUE ALABES A DIOS A TRAVÉS DEL CANTO, PARTICIPANDO EN EL
10º FESTIVAL MÚSICA DE FE
QUE SE REALIZARÁ EL 27 DE SEPTIEMBRE DE 2008, CON LAS SIGUIENTES
BASES:
1. Sobre la canción:
a) Tema: San Francisco de Asís, discípulo de Jesús
b) La duración no debe exceder los cuatro minutos (sin tolerancia).
c) Debe ser preparada en ocasión del 10º Festival Música de Fe, o bien, que no haya participado en otro festival y sea de ejecución exclusiva del participante. En ningún caso debe haber sido grabada en producción de estudio.
2. Cada participante puede escribir el número de temas que desee.
3. Los participantes deberán entregar una buena grabación, sobre la que nos basaremos para la selección, debe ser en audio cassete o CD y en un sobre adjunto:
a) La letra de la canción.
b) Datos del participante.
c) Dirección completa y teléfono del responsable y de un segundo encargado.
d) Dirección de correo electrónico.
Para toda correspondencia, utilizar la siguiente dirección:
Festival Música de Fe, Cómite Organizador,
Ap. 502, C.P. 54701, Cuautitlán Izcalli, Edo. de Méx.
Tel. (0155) 58 77 45 52 o 58 61 37 70
Fax. (0155) 58 77 46 14.
E-mail: festivalmusicadefe@yahoo.com.mx
4. La inscripción será de $100.00 (cien pesos) por canción.
5. De todos los temas inscritos se elegirán los doce (12) mejores, según el criterio de los organizadores, considerando:
a) Originalidad
b) Música
c) Interpretación
d) Letra
e) Mensaje
6. En el proceso de selección conforme al número 5 de esta convocatoria, sólo podrán pasar a la final un máximo de 2 temas por participante.
7. La convocatoria queda abierta hasta el 30 de Agosto del 2008 si la inscripción se realiza personalmente en alguno de los conventos de la Orden franciscana conventual; y hasta el día 15 de agosto, tomando en cuenta la fecha del matasellos, en caso de que el envío sea por correo.
8. La notificación de los finalistas será por vía telefónica.
9. La final se llevará a cabo por ejecución en vivo (no se permite el uso de pistas) en la Parroquia "Cristo del Valle y San Francisco de Asís", Av. Valle Santiago esquina Av. Valle Yangtze, Valle de Aragón 1ª Sección, Nezahualcoyotl, México; el Sábado 27 de septiembre de 2008 a las 17hrs.
10. En caso de que seas finalista del interior de la República y no tienes lugar donde quedarte en la ciudad de México, comunícate con nosotros y, sin adquirir compromiso de nuestra parte, veremos la posibilidad de hospedaje.
11.El jurado calificador estará integrado por conocedores de las categorías a calificar.
12. El premio será en efectivo.
13. Se darán reconocimientos en cada una de las categorías calificadas.
14. Todos los participantes ceden sus derechos a "Misiones Culturales de México A.C.-El Hijo de la Virgen".
Orden de Frailes Menores Conventuales.
Misiones Culturales de México A.C.
El Hijo de la Virgen
Para cualquier información dirígete con Fray Lorenzo Guzmán a los telefonos:
58 77 45 52
58 61 37 70

A veces pareciera que el amor ha perdido su fuerza.

Este es otro video muy chido, elaborado por nuestros hermanos menores de la Provincia del Santo Evangelio, ojala les agrade.
http://www.franciscanosenmexico.com/video1.html

Que pez con la vida religiosa

A ver que les parece este video acerca de la vida religiosa.
http://www.franciscanosenmexico.com/video4.html

Regla de los Hermanos Menores.

Regla bulada o definitiva (1223)
2Reg. I - ¡En el nombre del Señor! Comienza la vida de los hermanos menores
La regla y vida de los hermanos menores es ésta: guardar el santo Evangelio de nuestro Señor Jesucristo viviendo en obediencia. sin nada propio y en castidad.
El hermano Francisco promete obediencia y reverencia al señor papa Honorio y a sus sucesores canónicamente elegidos y a la Iglesia romana. Y los otros hermanos estén obligados a obedecer al hermano Francisco y a sus sucesores.
2Reg. II - Los que quieren tomar esta vida y cómo han de ser recibidos
Si algunos quieren tomar esta vida y vienen a nuestros hermanos, remítanlos a sus ministros provinciales, a ellos solamente, y no a otros, se conceda la licencia de recibir hermanos.
Y los ministros examínenlos diligentemente sobre la fe católica y los sacramentos de la Iglesia. Y si creen todo esto, y quieren profesarlo fielmente, y guardarlo firmemente hasta el fin, y no tienen mujeres -o, en el caso de tenerlas, también las mujeres han entrado ya en monasterio, o les han dado la licencia con la autorización del obispo diocesano, emitido ya el voto de continencia y siendo las mujeres de edad tal que de ellas no pueda originarse sospecha- , díganles la palabra del santo Evangelio (cf. Mt 19;21): que vayan y vendan todo lo suyo y procuren distribuírselo a los pobres. Y, si no pueden hacerlo, les es suficiente la buena voluntad.
Y guárdense los hermanos y sus ministros de tener solicitud por las cosas temporales de ellos, a fin de que hagan libremente de las mismas cuanto el Señor les inspire. Con todo, si se requiere un consejo, están autorizados los ministros para remitirlos a algunas personas temerosas de Dios, con cuyo consejo distribuyan sus bienes a los pobres.
Después, concédanles las prendas del tiempo de la probación; o sea: dos túnicas sin capucha, y cordón, y calzones, y capotillo hasta el cordón; a no ser que a los mismos ministros les parezca alguna vez otra cosa según Dios.
Y, cumplido el año de la probación, sean recibidos a la obediencia, prometiendo guardar siempre esta vida y regla. Y de ningún modo les estará permitido salir de esta Religión, según el mandato del señor papa; porque, según el santo Evangelio, ninguno que pone mano al arado y mira atrás es apto para el reino de Dios (Lc 9,62).
Y los que ya han prometido obediencia, tengan una túnica con capucha y otra sin capucha los que quieran tenerla.
Y quienes están apremiados por la necesidad pueden llevar calzado. Y todos los hermanos vistan ropas viles y puedan, con la bendición de Dios, remendarlas de sayal y de otros retales.
Amonesto y exhorto a todos ellos a que no desprecien ni juzguen a quienes ven que se visten de prendas muelles y de colores y que toman manjares y bebidas exquisitos; al contrario, cada uno júzguese y despréciese a sí mismo.
2Reg. III - El oficio divino, el ayuno y cómo han de ir los hermanos por el mundo
Los clérigos cumplan con el oficio divino según la ordenación de la santa Iglesia romana, a excepción del salterio, desde que puedan tener breviarios. Y los laicos digan veinticuatro padrenuestros por maitines; por laudes, cinco; por prima, tercia, sexta y nona, por cada una de estas horas, siete, por vísperas, doce, y por completas, siete. Y oren por los difuntos. Y ayunen desde la fiesta de Todos los Santos hasta la Navidad del Señor. Sin embargo, la santa cuaresma que comienza en la Epifanía y se prolonga cuarenta días continuos, la que el Señor consagró con su santo ayuno (cf. Mt 4,2), los que la ayunen voluntariamente, sean benditos del Señor, y los que no quieren ayunarla no sean obligados; pero la otra, que dura hasta la Resurrección del Señor, ayúnenla.
En otros tiempos, en cambio, no están obligados a ayunar sino los viernes. Con todo, en tiempo de manifiesta necesidad no están obligados los hermanos al ayuno corporal.
Aconsejo, amonesto y exhorto en el Señor Jesucristo a mis hermanos que, cuando van por el mundo , no litiguen ni contiendan de palabra (cf. 2Tim 2,14) ni juzguen a otros; sino sean apacibles, pacíficos y mesurados, mansos y humildes, hablando a todos decorosamente, como conviene. Y no deben cabalgar sino apremiados por una manifiesta necesidad o enfermedad. En toda casa en que entren digan primero: Paz a esta casa (cf. Lc 10,5). Y les está permitido, según el santo Evangelio, comer de todos los manjares que se les sirven (cf. Lc 10,8).
2Reg. IV - Los hermanos no reciban dinero
Mando firmemente a todos los hermanos que de ningún modo reciban dinero o pecunia ni por sí mismos ni por intermediarios. Sin embargo, únicamente los ministros y custodios provean con cuidado solícito, por medio de amigos espirituales, a las necesidades de los enfermos y al vestido de los hermanos, teniendo en cuenta los lugares, las épocas y las regiones frías, como vean que lo aconseja la necesidad; dejando siempre a salvo, como se ha dicho, el no recibir dinero o pecunia.
2Reg. V - Modo de trabajar
Aquellos hermanos a quienes ha dado el Señor la gracia del trabajo, trabajen fiel y devotamente de forma tal, que, evitando el ocio, que es enemigo del alma, no apaguen el espíritu (lTes 5,19) de la santa oración y devoción, a cuyo servicio deben estar las demás cosas temporales. Y como remuneración del trabajo acepten, para sí y para sus hermanos, las cosas necesarias para la vida corporal, pero no dinero o pecunia; y esto háganlo humildemente, como corresponde a quienes son siervos de Dios y seguidores de la santísima pobreza.
2Reg. VI - Nada se apropien los hermanos, la mendicación y los hermanos enfermos
Los hermanos no se apropien nada para sí, ni casa, ni lugar, ni cosa alguna .
Y, cual peregrinos y forasteros en este siglo (cf. Gén 23,4; Sal 38,13; lPe 2,11), que sirven al Señor en pobreza y humildad, vayan por limosna confiadamente. Y no tienen por qué avergonzarse, pues el Señor se hizo pobre por nosotros en este mundo (cf. 2Cor 8,9).
Esta es la excelencia de la altísima pobreza, la que a vosotros, mis queridísimos hermanos, os ha constituido en herederos y reyes del reino de los cielos, os ha hecho pobres en cosas y os ha sublimado en virtudes (cf. Sant 2,5). Sea ésta vuestra porción , la que conduce a la tierra de los vivientes (cf. Sal 141,6). Adheridos enteramente a ella, hermanos amadísimos, por el nombre nuestro Señor Jesucristo, jamás queráis tener ninguna otra cosa bajo el cielo.
Y dondequiera que estén y se encuentren unos con otros los hermanos, condúzcanse mutuamente con familiaridad entre sí. Y exponga confiadamente el uno al otro su necesidad, porque si la madre nutre y quiere a su hijo carnal (cf. lTes 2,7), ¿cuánto más amorosamente debe cada uno querer y nutrir a su hermano espiritual?
Y si alguno de los hermanos cae enfermo, los otros hermanos le deben servir como quisieran ellos ser servidos (cf. Mt 7,12).
2Reg. VII - Penitencia que se ha de imponer a los hermanos que pecan
Si algunos de los hermanos, por instigación del enemigo, incurren en aquellos pecados mortales de los que está determinado entre los hermanos que se recurra a solos los ministros provinciales, están obligados dichos hermanos a recurrir a ellos cuanto antes puedan, sin demora.
Y los ministros mismos, si son presbíteros, impónganles la penitencia con misericordia; pero, si no lo son, hagan que se la impongan otros sacerdotes de la Orden, como les parezca que mejor conviene según Dios. Y deben evitar airarse y conturbarse por el pecado que alguno comete, porque la ira y la conturbación son impedimento en ellos y en los otros para la caridad.
2Reg. VIII - Elección del ministro general de esta fraternidad y Capítulo de Pentecostés
Todos los hermanos estén obligados a tener siempre por ministro y siervo general de toda la fraternidad a uno de los hermanos de esta Religión, y estén obligados firmemente a obedecerle.
Cuando éste fallezca, hágase la elección del sucesor por los ministros provinciales y custodios en el Capítulo de Pentecostés; y a este Capítulo deban siempre concurrir los ministros provinciales, dondequiera que lo estableciere el ministro general; y esto han de hacerlo una vez cada tres años, o en otro término de tiempo mayor o menor, como lo haya ordenado el dicho ministro.
Y si alguna vez parece claro al conjunto de los ministros provinciales y custodios que el dicho ministro es insuficiente para el servicio y utilidad común de los hermanos, estén obligados los referidos hermanos, a quienes se ha confiado la elección, a elegirse en el nombre del Señor otro para custodio.
Y después del Capítulo de Pentecostés puede cada uno de los ministros y custodios, si quiere y le parece conveniente, convocar a sus hermanos una vez ese mismo año a Capítulo en su custodia.
2Reg. IX - Los predicadores
Los hermanos no prediquen en la diócesis de un obispo cuando éste se lo haya prohibido.
Y ninguno de los hermanos se atreva absolutamente a predicar al pueblo, si no ha sido examinado y aprobado por el ministro general de esta fraternidad, y no le ha sido concedido por él el oficio de la predicación.
Amonesto además y exhorto a estos mismos hermanos a que, cuando predican, sean ponderadas y limpias sus expresiones (cf. Sal 11,7; 17,31), para provecho y edificación del pueblo, pregonando los vicios y las virtudes, la pena y la gloria, con brevedad de lenguaje, porque palabra sumaria hizo el Señor sobre la tierra (cf. Rom 9,28).
2Reg. X - Amonestación y corrección de los hermanos
Los hermanos que son ministros y siervos de los otros visiten y amonesten a sus hermanos, y corríjanlos humilde y caritativamente, y no les manden algo que esté en contra de su alma y de nuestra Regla.
Pero los hermanos que son súbditos recuerden que renunciaron por Dios a los propios quereres. Por lo cual, les mando firmemente que obedezcan a sus ministros en todo lo que prometieron al Señor guardar y no está en contra del alma y de nuestra Regla.
Y dondequiera que hay hermanos que sepan y conozcan que no pueden guardar espiritualmente la Regla, deben y pueden recurrir a sus ministros. Y los ministros acójanlos caritativa y benignamente, y tengan para con ellos una familiaridad tan grande, que puedan los hermanos hablar y comportarse con los ministros como los señores con sus siervos; pues así debe ser, que los ministros sean siervos de todos los hermanos.
Amonesto y exhorto en el Señor Jesucristo a que se guarden los hermanos de toda soberbia, vanagloria, envidia, avaricia (cf. Lc 12,15), preocupación y solicitud de este mundo (cf. Mt 13,22), difamación y murmuración, y no se preocupen de hacer estudios los que no los hayan hecho. Aplíquense, en cambio, a lo que por encima de todo deben anhelar: tener el espíritu del Señor y su santa operación, orar continuamente al Señor con un corazón puro, y tener humildad y paciencia en la persecución y en la enfermedad, y amar a los que nos persiguen y reprenden y acusan, porque dice el Señor: Amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen y calumnian (cf. Mt 5,44). Dichosos los que padecen persecución por la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos (Mt 5 ,10). Y quien persevere hasta el fin, éste se salvará (Mt 10,22).
2Reg. XI - Los hermanos no entren en monasterios de monjas
Mando firmemente a todos los hermanos que no tengan sospechoso trato o consejos de mujeres; y que no entren en monasterios de monjas, fuera de aquellos hermanos que tienen una licencia especial concedida por la Sede Apostólica; tampoco se hagan padrinos de varones o de mujeres, ni con esta ocasión se origine escándalo entre los hermanos o acerca de ellos.
2Reg. XII - Los que van entre sarracenos y otros infieles
Aquellos hermanos que quieren, por inspiración divina, ir entre sarracenos y otros infieles, pidan para ello la licencia a sus ministros provinciales. Pero los ministros no otorguen la licencia para ir sino a los que vean que son idóneos para ser enviados.
Además: impongo por obediencia a los ministros que pidan al señor papa un cardenal de la santa Iglesia romana que sea gobernador, protector y corrector de esta fraternidad; para que, siempre sumisos y sujetos a los pies de la misma santa Iglesia, firmes en la fe católica (Col 1,23), guardemos la pobreza y la humildad y el santo Evangelio de nuestro Señor Jesucristo que firmemente prometimos.

Frailes Menores Conventuales

Los Franciscanos Conventuales son el tronco original de la Orden, del que brotaron las distintas reformas. Ya el 5 de abril de 1250, el papa Inocencio IV quiso tutelar la eficaz labor pastoral de los Menores, declarando "conventuales" sus iglesias, es decir, concediéndoles la misma prerrogativa que las colegiatas. Los frailes, sin embargo, no recibieron tal denominación hasta la segunda mitad del siglo XIV, para distinguirlos de quienes se retiraban en los eremitorios, en busca de una mejor "observancia" de la Regla.
Los religiosos que seguían viviendo en los eremitorios, como en los tiempos heroicos de san Francisco, eran muy pocos. La gran mayoría, es decir los frailes "de la Comunidad" estaban en las ciudades, dedicados a la predicación, los sacramentos y la enseñanza. Ello supuso la construcción y ampliación de grandes conventos, como los de Asís, Padua, Venecia, Florencia, Bolonia, Ferrara, Piacenza, Parma, Arezzo, Siena, Pisa, Palermo, Viterbo, Nápoles, Vicenza, Friburgo, Cracovia, Colonia, Würzburg, Viena, Praga, Barcelona, Valencia, Sevilla, París, Oxford, etc. La Orden fundada por san Francisco estaba formada, en gran parte, por hermanos legos, pero, un siglo después de su muerte era una Orden docta y clerical, con decenas de miles de religiosos que servían a la Iglesia en múltiples actividades: pastorales, misioneras, diplomáticas, ecuménicas, universitarias, llegando muchos de ellos a ocupar cátedras episcopales, cardenalicias e incluso papales.
Mitigaciones y tensiones
El mantenimiento de grandes conventos no permitía la observancia de la pobreza absoluta, mas los papas, interesados en mantener los beneficios pastorales que aportaban a la Iglesia, mitigaron con privilegios y declaraciones la observancia de la Regla. A ello se opusieron grupos de frailes Celantes, Espirituales o Fraticelli, partidarios de una pobreza más radical, sin interpretaciones pontificias, hasta el extremo de acusar a la Orden de relajación en el Concilio de Viena (1311-1312) y de negar al Papa el derecho a interpretar la Regla. Fue por ese motivo por lo que el que el papa Juan XXII (1317-1318) acabó condenando a los fraticelli por herejes.
En la misma línea de los Fraticelli, pero con actitudes y comportamientos más ortodoxos, en 1368 nacieron los Hermanos Menores Observantes o de la Regular Observancia, por obra del beato Paoluccio Trinci. Éstos tuvieron más éxito y fueron creciendo y distinguiéndose cada vez más del resto de la Orden, a veces entre fuertes tensiones, hasta su total independencia (1517). Los Conventuales, mientras tanto, ante la presión de la Observancia, trataron de eliminar los evidentes abusos, pero defendieron y continuaron aquella forma de vida que les permitía desarrollar dignamente las actividades tradicionales que la complejidad de la Orden y la Iglesia requerían. Conviene recordar que, aparte de Nicolás IV (Jeronimo Masci, 1288-1292) que era Minorita, fueron Conventuales los papas Alejandro V (Pitros Philargis, 1409-1410), Sixto IV (Francisco della Rovere1471-1484), Sixto V (Félix Peretti de Montalto, 1585-1590) y Clemente XIV (Lorenzo Ganganelli, 1769-1774).
El imparable crecimiento y separación de los frailes de la Observancia provocó no pocas tensiones entre ambas corrientes de la Orden, ya que éstos, no conformándose con los eremitorios, empezaron a ocupar también los grandes conventos urbanos de los Conventuales y a absorber todas aquellas reformas que preferían seguir sometidas al Ministro General Conventual, como signo de unidad y de comunión con la Orden. En España, los frailes Conventuales o Claustrales fueron suprimidos, a instancias de los Observantes, por los Reyes Católicos a principios del siglo XVI, y por Felipe II en 1568.
Separación y renovación
Cincuenta años antes, el 29 de mayo de 1517, el papa León X, con la bula "Ite vos", había dividido definitivamente la Orden en dos , obligando a las reformas menores a unirse a los Observantes o a los Conventuales. Fue un duro golpe para los Conventuales, que se vieron obligados a ceder la primacía y el título de Hermanos Menores a los Observantes. No obstante, en el siglo XVII y parte del XVIII, los Conventuales, purificados por las pruebas de siglos anteriores, demostraron una gran vitalidad, como demuestra el testimonio de algunos santos y beatos de aquel periodo. Por desgracia, el franco crecimiento de la Orden fue frenado bruscamente por la Revolución francesa, las desamortizaciones napoleónica y de los gobiernos masónicos del siglo XIX y la supresión comunista de las órdenes religiosas en varios países del este europeo. Todo ello puso en peligro la existencia misma de la Orden. Muchos religiosos se vieron obligados a secularizarse y gran parte de los conventos fueron transformados en cuarteles, hospitales, escuelas, asilos, cárceles, oficinas, etc. Los casi 30.000 miembros con que contaba la Orden Conventual en el siglo XV quedaron reducidos, en 1883, a sólo 1481. Sin embargo, desde entonces no ha dejado de crecer y extenderse, sobre todo, ultimamente, en los continentes americano y asiático y en el este europeo, hasta alcanzar el número actual de 4.500 religiosos. Es la rama menos numerosa de la Orden, pero están presentes en todo el mundo.

Presencia y actividad hoy en el mundo
La Orden Conventual está actualmente comprometida con la Iglesia en las más variadas tareas de apostolado, que son expresión de su propia razón de ser. Centenares de iglesias y 19 basílicas -las más antiguas de la Orden- son el campo de acción de una intensa actividad litúrgica y pastoral. La curia general OFM Conv. y los organismos directivos tienen su sede en la Basílica romana de los Santos Doce Apóstoles, confiada a la Orden por Pío II en 1463, después de que la sede anterior, Santa María de Araceli, fuese entregada por Eugenio IV a los Observantes (1445). El corazón de la Orden es, sin embargo, la Basílica de San Francisco en Asís, con el anejo Sacro Convento, declarado "Cabeza y Madre" de la Orden por el fundador de la iglesia Gregorio IX en 1230, en vísperas de la traslación del cuerpo de San Francisco a la misma.
Los Conventuales tienen también a su cargo la Basílica de San Antonio en Padua, meta de peregrinos de todo el mundo y centro de intensa actividad litúrgica, pastoral, cultural, editorial y caritativa; y la Basílica de la Santa Cruz de Florencia, verdadera joya del arte italiano, Santa María Gloriosa "dei Frari" de Venecia; y las iglesias de San Lorenzo de Nápoles y de San Francisco de Bolonia y de Rávena (con la tumba de Dante Alighieri). Ejercen, además, como Penitenciarios Pontificios en la Basílica de San Pedro del Vaticano y regentan la Pontificia Facultad de Teología de San Buenaventura en el Colegio "Seraphicum" de Roma, con su filial de Pádua, el Instituto de Teología "San Antonio Doctor" o Colegio San Máximo. A ello hay que añadir el Instituto Teológico de Asís, agregado a la Facultad de Sagrada Teología de la Pontificia Universidad Lateranense. En las últimas décadas la Orden Conventual he redescubierto su vocación misionera, abriendo nuevas Provincias y Custodias en todo el mundo.
El hábito conventual es el tradicional: túnica y capucho gris con la cuerda. En época napoleónica se cambió al negro, pero hoy se viste de gris en varios países de Europa y en el resto del mundo.

Cronología breve de la vida de San francisco de Asís.

1182, enero-febrero - Francisco nace en Asís, de Pedro de Bernardone y madonna Pica (ver Casa de San Francisco).
1192 aprox. - Frecuenta la escuela de los canónigos de la parroquia y hospital de San Jorge.
1196 - A los 14 años empieza trabajar en el comercio de tejidos de su padre.
1198 - La clase burguesa de Asís se subleva contra los nobles e instaura el régimen comunal.
1201, noviembre - Francisco combate con el ejército asisano contra Perusa y es apresado.
1202, noviembre - Regresa de la prisión y cae enfermo. Las pruebas le ayudan a madurar.
1205, verano - Animado por un sueño se dirige a combatir en Puglia; el Señor lo vuelve atrás en Espoleto.
1205, otoño - Una dulzura interior lo arrastra a la oración y a ser generoso con pobres y leprosos.
¿noviembre? - En San Damián Cristo desde la Cruz lo invita a reparar su Iglesia. Vende el caballo y algunas telas caras y entra en conflicto con el padre.
¿diciembre? - Tras un mes escondido, hace frente al padre, que lo encierra y lo denuncia.
1206, ¿enero? - convencido por el obispo, devuelve a su padre el dinero y toda su ropa, consagrándose al Señor. A Clara le hubiese gustado hacer lo mismo, pero tiene apenas 13 años y tiene que esperar.
Nada para el camino

1206, invierno - Breve estancia en Gubbio. Regresa a San Damián, a reparar la iglesia.
1208, 24 de febrero - Oye el Evangelio de la misión de los apóstoles (Mt 10) y lo pone en práctica, despojándose de sandalias, bastón, cintura, dinero, alforja, etc.
16 de abril - Invita a la conversión y saluda con la paz. Lo siguen los primeros compañeros: Bernardo de Quintavalle y Pedro Cattanei. Se instalan en Rivotorto.
23 de abril - Se les une fray Gil y Francisco recorre con él la Marca de Ancona.
primavera-verano - Nuevos compañeros. Los anima a pedir limosna. A falta de libros les enseña a adorar la Cruz y a rezar Padre nuestros, en vez de los salmos.
verano - Cuando ya son ocho, los envía de dos en dos por el mundo, entre grandes padecimientos y burlas de la gente, más ellos soportan todo con paciencia.
La Regla es el Evangelio

1209, invierno - Regresan a Rivotorto. Francisco compone una Regla breve, con frases del Evangelio. La nueva Orden se llamará "Hermanos Menores".
¿23 de abril? - Inocencio III aprueba oralmente la Regla.
noviembre - El emperador Otón pasa por Rivotorto y Francisco no permite que los hermanos salgan a verlo.
25 de diciembre - La Navidad cae en domingo y Francisco responde a fray Morico que ese día no sólo no hay que ayunar, sino que hasta las paredes deberían ser untadas de carne.
1210-1211 - La estrechez del lugar les obliga a abandonar Rivotorto. Se instalan en Santa María de la Porciúncula, iglesia en ruínas de los benedictinos de Asís.
1211, lunes santo - La joven y noble Clara de Asís ya tiene 18 años. Después de rechazar las propuestas matrimoniales de algunos pretendientes, una noche escapa de casa y se une a Francisco. Se retira en el monasterio de Panzo
1211-1212 - Clara, con su hermana Inés y otras compañeras, se traslada de Panzo a San Damián.
Por los caminos del mundo

1212 - Cuaresma de Francisco y los suyos en "Las Cárceles" del monte Subasio.
primavera - Previo discernimiento de Clara y Silvestre, deciden salir de Asís, de dos en dos. Francisco predica en Cannara y a los pájaros en Bevaña. primavera-verano - Con fray Maseo por la provincia de Siena y en Roma. verano-otoño - Se embarca rumbo a Siria, pero no pasa de las costas croatas.
1213, 8 de mayo - En Montefeltro el conde Orlando de Chiusi le ofrece el monte de la Verna. primavera-verano - Encuentro fraterno en Asís. Se dirige a Marruecos con fray Bernardo.
verano - 1214 verano - La enfermedad y otras dificultades le impiden llegar a Marruecos, pero recorre España y Portugal, hasta Santiago de Compostela.
1214-15 - En Asís se le unen algunos nobles y letrados: Fray Pacífico, Tomás de Celano, Juan Parenti, Alberto y Agnello de Pisa, Elías, etc.
1215, 2 de agosto - Acabada de restaurar, se consagra al culto la iglesia de la Porciúncula. noviembre - El Santo participa en el Concilio IV de Letrán. Conoce a Santo Domingo.
1216, primavera - Por disposición conciliar se reúne el primer capítulo general oficial de la Orden l(capítulo "de los 300" en San Verecundo, Gubbio).
julio - Inocencio III, concede un privilegio "de pobreza" a Santa Clara y muere en Perusa, atendido por San Francisco, que solicita al sucesor, Honorio III, la indulgencia de la Porciúncula.
El cardenal Hugolino, protector de la Orden

1217, Pentecostés - Primer capítulo general en la Porciúncula. Creación de las provincias y elección de los ministros. Primer envío a países cristianos fuera de Italia.
junio-julio - Francisco quiere ir a Francia. El cardenal Hugolino lo detiene en Florencia y se ofrece a ayudarlo como protector de la Orden.
1218, invierno - Fracasan las misiones extranjeras. Comparecencia y predicación memorable ante el papa, que concede a Hugolino como protector. Francisco se reúne con Santo Domingo en casa del cardenal.
Pascua - Hugolino visita la Porciúncula y San Damián y se hace cargo de las clarisas.
Pentecostés - Hugolino y Santo Domingo en el capítulo general.
1219, Cuaresma - Fundación del monasterio de damianitas de Monticelli (Florencia). Hugolino y Francisco redactan para ellas unos Estatutos.
San Francisco y el sultán de Egipto

1219, Pentecostés - Primer envío de religiosos a países musulmanes.
1219-1220 - Francisco se embarca en Ancona, rumbo a Oriente. Asiste a la toma de Damieta en Egipto y, arriesgando su vida, logra entrevistarse con el Sultán Melek-el-Kamel, que quedó impresionado de la fe de aquel hombre, que le parecía "un verdadero cristiano".
1220, 16 de enero - Martirio de los cinco hermanos enviados a Marruecos. Sus restos trasladados a Coimbra animan a Fernando de Lisboa (Antonio de Pádua) a hacerse fraile Menor.
La crisis: gobernar con el ejemplo

1220, Pentecostés - Cápitulo general en ausencia de Francisco. El malestar provocado por algunas decisiones de los ministros y vicarios del Santo le obligan a regresar de Oriente antes de lo previsto. Vuelve enfermo de malaria y con una grave infección ocular. septiembre - Hugolino lo ayuda a resolver los problemas de la Orden. El papa impone el noviciado y no acepta su renuncia al cargo de ministro general.
septiembre-octubre - Francisco, enfermo y deprimido, delega el gobierno de la Orden en un vicario: fray Pedro Cattani.
otoño - Enfermo y convaleciente en casa del obispo Guido II. Se acusa publicamente de sus faltas y se castiga duramente, para dar ejemplo.
1221, marzo - Muere el vicario Pedro Cattanei. El sucesor será fray Elías de Asís
El último capítulo "de las esteras"

1221, Pentecostés - Último capitulo de las esteras, con 3000 participantes. Se crea la provincia de Alemania. San Antonio, destinado a Montepaolo (Forlí), se revela un gran predicador.
Austeridad, ciencia y virtud
1221, verano-otoño - El santo recorre el centro y sur de Italia. Pasa la cuaresma de San Martín en Contigliano. Huye de la vanagloria y se mortifica más de lo debido, para dar ejemplo. A un novicio que le pide un salterio, le enseña a anteponer la virtud a la ciencia. Recorre el centro y las regiones meridionales de Italia.
Un santo con depresión

1222: primavera - Francisco regresa a Asís con una fuerte depresión, manifestada, por ejemplo, en su visita a Clara y a sus hermanas reclusas en San Damián. Pentecostés - Tenso capítulo por la presión de algunos ministros, que prefieren la Regla de San Agustín o la de San Benito.
Predicador popular
1222, primavera-verano - Recorrido por el norte de Italia. Francisco predica en Alejandría y Bolonia.
otoño - en Florencia, Poggibonsi, Siena y Sarteano (Siena), donde combate las tentaciones abrazando bolas de nieve.
Aprobación de la Regla definitiva
1223, invierno - Con fray León en Fontecolombo , para redactar la regla definitiva. Elías extravía el texto y el Santo la compone de nuevo. primavera-verano - La enfermedad le impide ir al Capítulo, donde los ministros debían debatir el nuevo texto. La fiebre le hace delirar. noviembre - Honorio III corrige el borrador y aprueba la Regla (bula "Solet anuere".
1223, diciembre - 1224, abril - Francisco regresa a Fontecolombo. En Greccio, representación del Nacimiento de Cristo. Permanece allí hasta la Pascua.
1224, abril-mayo - A Asís por Perusa. Dicta a fray León "la verdadera alegría". Durante el capítulo se limita a rezar y a dar buen ejemplo. Entra en vigor la nueva Regla. En adelante los capítulos serán trienales. Se crea la provincia de Inglaterra.
Crucificado con Cristo
1224, verano - Francisco se entretiene con la cigarra y el ruiseñor. Sale de Asís, se detiene en Montecasale y la Verna, donde decide hacer una Cuaresma del 15 de agosto al 29 de septiembre. El 14 de septiembre recibe en su cuerpo la impresión de las llagas.
El lobo de Gubbio
otoño - Baja de la Verna por Borgo, Sansepolcro, Montecasale, Cittá de Castello (un mes), Gubbio (los lobos), San Verecundo (la cerda y el cordero), Asís. Continúa con fray Elías por Foligno Terni y Narni. Oculta las llagas, pero el Señor las manifiesta con prodigios.
San Francisco, la paz y las criaturas
1225, invierno-primavera - Enfermo y casi ciego en San Damián. Compone el Cantico de las Criaturas. Reconcilia al obispo y al "podestá" de Asís.
Gravemente enfermo
verano-otoño - A Rieti (La Foresta, Fontecolombo) para una cura oftalmológica.
1226, invierno - A Siena, para otra intervención quirúrgica. Se agrava.
primavera - Con fray Elías en Celdas de Cortona. Nuevo agravamiento.
primavera-verano - En la Porciúncula y en un eremitorio cerca de Nocera.
Muerte y sepultura
1226, septiembre - Gravísimo en el obispado de Asís. Ultimas voluntades y el Testamento.
Finales de septiembre - Pide el traslado a la Porciúncula. Últimas bendiciones.
3 de octubre - "Bienvenida la hermana muerte".Muere desnudo en el suelo.
4 octubre - Solemnes funerales y traslado a Asís, por San Damián. Llanto de Clara y las damianitas. Fray Elías lo coloca en un sarcófago de piedra con rejas de hierro, en la iglesia de San Jorge.
Canonización y sepultura definitiva
1227, marzo. Muere Honorio III. Eligen sucesor al cardenal Hugolino, con el nombre de Gregorio IX.
1228, 16 julio - Gregorio IX canoniza a San Francisco en la explanada de la iglesia de San Jorge (plaza de Santa Clara).
17 julio - El papa coloca en la "Colina del Infierno" la primera piedra de la Basílica de San Francisco, para su sepultura, y nombra a Fray Elías responsable de la construcción.
1230, mayo - traslado del sarcófago con los restos del Santo a la nueva iglesia.
1253, abril - Inocencio IV consagra solemnemente la doble Basilica de San Francisco.
11 agosto - Muere Santa Clara. Inocencio IV preside sus funerales.